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Nuevas oportunidades para que las redes de pesca de polietileno no sean basuras marinas

Autor: Beatriz Paredes Martínez
Profesora Titular de Universidad
URJC - Universidad Rey Juan Carlos
Otros autores: Rafael Juan (LATEP-URJC); Carlos Domínguez (LATEP-URJC); Rafael A. García-Muñoz (URJC); Nuria Robledo (LATEP-URJC); Sara Galera (REPSOL)
Formato: Comunicación técnica escrita / Comunicación técnica panel
Tipo: Científico Técnica
Temática: Residuos
ODS relacionados: Industria, innovación e infraestructura, Producción y consumo responsables, Vida submarina
Documentos asociados: Doc. Escrito Doc. Panel
Resumen:
Los residuos plásticos pueden dañar el medio ambiente, causar pérdidas económicas e incluso afectar a la salud humana a través de la cadena alimentaria y el aire. Este fenómeno se agrava por la creciente cantidad de residuos plásticos que se generan, lo que ha convertido su gestión en un aspecto prioritario a nivel mundial.
Cerca de 11 millones de toneladas de residuos plásticos acaban en los océanos cada año y se estima que, si no se aplican medidas, este flujo de residuos triplicará su valor para 2040. Alrededor del 20 % de los residuos plásticos que se encuentran en el mar proviene de actividades marinas, suponiendo un gran reto debido a la dificultad en la recogida de estos residuos y a la falta de gestión de herramientas de pesca inservibles. En Europa, las redes de pesca se encuentran en la lista de los 10 residuos más comunes encontrados en playas y costas. Esto, unido a que suelen tener una vida útil corta, hace que se descarten alrededor de 640.000 toneladas cada año, aunque la subestimación sobre las herramientas de pesca abandonadas podría dificultar la valoración real del impacto de estas fuentes de contaminación.
Estos residuos conducen, no solo a efectos importantes en la flora y fauna marina debido al consumo de microplásticos por su parte y a la denominada "pesca fantasma", sino que también causan importantes daños económicos y sociales. Para combatir esta preocupación y reducir la contaminación plástica en el medio marino, los esfuerzos se están dirigiendo a desarrollar nuevas formas de reducir, reutilizar y reciclar estos productos con el objetivo de lograr una Economía Circular y cumplir las directrices adoptadas en este sentido por la Unión Europea.
Sin embargo, el reciclaje de herramientas y redes de pesca no es una tarea fácil, ya que están hechas de diferentes plásticos, principalmente de poliamida (PA), polipropileno (PP) y polietileno (PE). Este trabajo se centra en estas últimas, ya que ambas, PP y PE, se utilizan generalmente para producir redes de arrastre, que sufren daños abrasivos y, por tanto, las resinas recicladas de estos materiales suelen tener un menor rendimiento, que hace difícil su competencia con el material virgen. Por ello, para mejorar sus propiedades y extender su uso como material reciclado, se plantea realizar la mezcla con resinas vírgenes en diferentes porcentajes, de tal manera que podría garantizar los requisitos para las aplicaciones deseadas, constituyendo así una estrategia factible para reutilizar redes de pesca de polietileno recicladas y ayudar al desarrollo de una economía circular del plástico.

















Este proyecto cuenta con la financiación del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico a través de la convocatoria pública de subvenciones a entidades del Tercer Sector para actividades de interés general consideradas de interés social en materia de investigación